El martes 23 de mayo se ha constituido la mesa electoral para celebrar elecciones el jueves, 25 de mayo, para el centro de Distribución Diego Martínez Barrios (DMB) de Sevilla. En dicho acto de constitución tanto SIE como CCOO manifestaron su oposición a la celebración por dos motivos:
- Los trabajadores que participan están también en el censo de las elecciones del centro de trabajo Borbolla, una elecciones que, además, queremos finalizar, dado que se suspendieron por la pandemia y no hay razón alguna para mantenerlos paralizados.
- Existe un comité agrupado en Sevilla para los trabajadores de los centros con menos de 50 personas. Por tanto, estos trabajadores deben sumarse a dicha agrupación.
Para ahondar más en el sinsentido de estas elecciones, el censo de DMB es artificial y no contempla a todos. El censo facilitado para estas elecciones consta de 34 personas que, en su mayoría, están trabajando en Cartuja y, sin embargo, no están en él más de 200 trabajadores que físicamente están yendo a DMB pero que tienen este centro como provisional y no aparecen en el censo.
¿Por qué hay personas que tienen el centro de trabajo DMB provisional que no pueden votar y otros que lo tienen como definitivo, aunque ni siquiera acuden a dicho centro y pueden votar? Pues el origen de esta manipulación viene por las obras de Borbolla y Ramón y Cajal (RyC). Cuando Borbolla entra en obras sus trabajadores se reparten entre los edificios cercanos, y resulta que los que están en RyC posteriormente se deben desplazar a Cartuja por los ruidos que hay en la oficina. A los trabajadores de Borbolla que estaban en esta oficina, antes de recibir la carta de movilidad provisional a Cartuja, reciben una carta de movilidad definitiva a RyC/DMB arbitrariamente. Y esto es lo que consta en el censo.
Antes de que acabe este año, con la vuelta a Borbolla y desaparecer DMB, estos delegados elegidos, caso de que no prospere la impugnación de este proceso, carecerán de representatividad.
Desde CCOO queremos finalizar todos los procesos electorales suspendidos por la pandemia como base de la representatividad que negocie el siguiente convenio, y no ir celebrándolas allí donde le interese a la empresa o el sindicato de turno. ¿Por qué no se cierran estos procesos electorales pendientes y sí se promueven otros? ¿A quién si no beneficia todos estos movimientos?